¿Hay algo más delicioso en el mundo que una abundante lasaña? Normalmente las láminas de lasaña se esconden entre capas de boloñesa, bechamel y queso, y solo las contemplamos en todo su esplendor una vez que hundimos el tenedor en ellas. Pero en esta receta hemos cambiado las tornas: ahora las láminas de lasaña cubrirán al relleno, dando al clásico italiano un look fresco y renovado.
Ingredientes:
- Aproximadamente 30 láminas de lasaña
- 100 g de salami en rodajas
- 150 ml de salsa bechamel
- 100 g de queso mozzarella rallado
Para el pesto:
- 1 ramo de albahaca
- 75 g de piñones tostados
- 70 g de queso parmesano rallado
- 1 diente de ajo finamente picado
- 125 ml de aceite de oliva
Para la boloñesa:
- 500 g de carne molida
- 75 g de cebolla finamente picada
- 1 diente de ajo finamente picado
- 1 cucharada de albahaca seca
- 200 ml de salsa de tomate
- 50 g de queso mozzarella rallado
- Sal y pimienta
Modo de preparación:
1. Para la boloñesa, primero fríe la carne molida con cebolla, ajo y albahaca. Añade la salsa de tomate y el queso mozzarella, y deja cocinar brevemente. Deja la boloñesa enfriar.
Mezcla los ingredientes para el pesto y mételos en el refrigerador.
2. Hierve las láminas de lasaña en agua hasta que estén blandas y déjalas luego enfriar. Coloca las láminas sobre un bol circular grande dejando que sobresalgan por los bordes del bol.
3. Coloca la mitad de las rodajas de salami sobre las láminas de lasaña y cubre con una mezcla de salsa bechamel y mozzarella.
4. Cubre esta capa con más láminas de lasaña. Coloca encima la otra mitad de rodajas de salami y vuelve a cubrir con más mezcla de bechamel y mozzarella.
5. Vuelve a cubrir con láminas de lasaña y luego con el pesto. Cubre el pesto con más láminas de lasaña.
6. Repite paso a paso hasta poner una nueva capa de pesto.
7. Añade la mitad de la boloñesa en el bol y cubre con láminas de lasaña.
8. Repite el proceso hasta poner una nueva capa de boloñesa.
9. Dobla las láminas de lasaña que sobresalen del bol hacia dentro.
10. Hornea el pastel de lasaña durante 35 minutos a 150 °C con la circulación de aire activada. Voltéalo sobre un plato o bandeja grande.
Como pastel, las láminas de lasaña entran por la puerta grande del mundo culinario. Con su aromática boloñesa, delicada bechamel y cremoso pesto, esta lasaña única reúne todos los requisitos para que la quieras preparar más de una vez.
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