Hierve las papas. Luego ponlas en un bol y tritúralas. Añade la mantequilla, la sal y la nuez moscada.
Pon la carne molida, la cebolla, el perejil, el ajo, la harina, el aceite, el huevo, la sal y la pimienta en un bol, y mézclalo todo. Forma 6 bolas con la mezcla y coloca una bolita de mozzarella en el centro de cada una. Asegúrate de que la mozzarella quede bien cubierta de carne molida.
Pon el puré de papas en una fuente de horno engrasada con aceite o mantequilla y alisa la superficie. Utiliza el mango de una cuchara de madera para hacer surcos profundos en el puré de papa, lo que creará 6 cuadrados iguales. A continuación, utiliza un vaso para hacer un hueco redondo en cada cuadrado.
Reparte el queso rallado en las cavidades y la salsa de tomate en los surcos.
Coloca una albóndiga en cada cavidad. Reparte el queso rallado por toda la cazuela. Introduce la cazuela en el horno a 175 °C durante 30 minutos con el calor de arriba y abajo activado.
Para servir, espolvorea perejil picado por encima de la cazuela.