Dibuja unos 3/4 del borde de un plato con motas alternadas de salsa de frambuesa y vainilla. Pasa un palo de madera a través de las motas para unirlas en forma de corazón. Coloca en la zona libre del plato un postre de tu elección, por ejemplo una tartaleta de crema con fresas en rodajas, crema batida y una vaina de vainilla.
Vierte la salsa de fruta sobre un plato, presiónala con la mano y luego imprime otro plato blanco con la huella afrutada de tu mano. Coloca una bolita de mousse entre el pulgar y el índice y cinco bolitas más a la derecha y a la izquierda de la mano. A continuación, prepara un postre de tu elección, como por ejemplo una bola de coco o una tartaleta de coco con grosellas, moras y hojas de menta.
Distribuye círculos de la salsa de frambuesa y mango sobre el plato. Pasa las puntas de un tenedor a través de los anillos de la salsa, de dentro hacia afuera y de fuera hacia dentro. Coloca en el plato una tartaleta de chocolate (u otro postre) y también pequeñas gotitas de nata. Decora con grosellas, hojas de menta y physalis.
Haz dibujos diagonales con chocolate derretido sobre el lado de un plato. Da forma de olas al chocolate con una espátula dentada, de izquierda a derecha. Coloca el muffin en la esquina libre del plato y decora tu postre con fruta y menta fresca.
Pega dos tiras de cinta de celofán paralelas en el lado izquierdo del plato y otras dos paralelas entre sí en diagonal en el lado derecho. Unta el interior de las cintas con chocolate blanco derretido. Deja el chocolate reposar brevemente y retira las cintas de celofán. Sirve tu plato decorado por ejemplo con tartaletas de chocolate, rodajas de fresa, crema de fruta roja y más fruta.
Con una manga pastelera, dibuja espirales de la salsa de vainilla en el plato. Después reparte el pesto de menta con una cuchara pequeña en las zonas intermedias. Finalmente, coloca encima un postre de tu elección, como fruta y crocante de nueces.
Bate la clara de huevo hasta que esté cremosa. Añádele azúcar. Bate hasta que el merengue esté firme y brillante. Distribuye el merengue por un plato para servir o uno plano, y presiona con un molde para pastel. Levanta con cuidado el molde. Calienta el rayo de merengue con un encendedor Bunsen. Ahora puedes servir tu plato por ejemplo con tartaletas de coco, fruta y menta fresca.
Coloca el plato sobre uno giratorio y hazlo girar. Extiende la salsa de fruta roja por el plato en forma de rejilla. Rellena algunos de los espacios interiores con salsa de fruta amarilla y pesto de menta. Coloca encima un postre de tu elección, como por ejemplo, una tartaleta de fruta.
