Bate las claras de huevo, añade poco a poco el azúcar y sigue batiendo hasta conseguir un merengue firme. Incorpora de forma alternada la leche, el aceite vegetal y la harina al merengue. Vacia las lentejas secas en el pequeño tazón y colócalo en la parte superior del molde redondo desmontable forrado con papel de hornear. A continuación, vierte la masa alrededor del tazón y hornea todo en el horno precalentado a 170 °C durante 90 minutos con el calor de arriba y abajo activado. Deja que el pastel se enfríe completamente después de hornearlo (aproximadamente 2 horas) y solo entonces retira el tazón con las lentejas y el anillo del molde desmontable.
Mezcla la gelatina en polvo con 10 cucharadas de agua y deja que se hinche durante unos 10 minutos. Calienta hasta unos 60 ºC el agua restante con el jugo de limón, el azúcar, la canela, el anís estrellado y disuelve en ella la gelatina hinchada. Retira las especias y cuela el líquido con un paño, preferiblemente 2 o 3 veces, para que quede bien claro. Deja que todo se enfríe a unos 25 °C.
Bate la mantequilla con una batidora eléctrica hasta que esté blanca y cremosa. Añade poco a poco el azúcar en polvo y sigue batiendo. Por último, integra con cuidado el queso crema. Es importante que todos los ingredientes estén a la misma temperatura.
Corta la parte inferior del pastel y recorta una colina, una casa con techo y ventanas y un muñeco de nieve. Ponle al muñeco de nieve una cara hecha con perlas de chocolate y zanahoria de fondant. Rellena el hueco con la primera capa de gelatina y espolvoréala con ralladura de coco. Deja que la gelatina cuaje y luego coloca los recortes de bizcocho del punto 4, formando una casita y un muñeco de nieve sobre una colina.
Vierte poco a poco más capas de gelatina líquida en el pastel hasta llegar a la parte superior. Espolvorea con coco rallado cada capa excepto la última. Deja enfriar el pastel durante al menos 4 horas (preferiblemente toda la noche). Extiende la crema de mantequilla por todo el pastel y déjalo enfriar otros 30 minutos. Con la ayuda del papel de hornear de la base, coloca el pastel sobre el borde plano en una bandeja plana.